martes, 12 de julio de 2005

Hoy será un día largo

En primer lugar, a los que entran a dejar mensajes del tipo "poco hay que contar en tu vida", les diré que nunca he presumido de llevar una vida plena o interesante en ningún sentido, y que si entran aquí es por que quieren, así que que al menos tengan la mínima decencia y el tacto necesario para no molestar.
Hoy me he levantado como cada día, pero como se ve que ando falta de luces, va para la segunda vez en este mes que olvido tomarme mi pastilla milagrosa de cada mañana. Hace dos semanas me pasó igual. Normalmente, cuando me pasa, no suelo darme cuenta hasta que empiezo a notar los efectos, pero hoy me he dado cuenta de camino al trabajo. Peor, porque ahora estaré pensando antes de que me lleguen esos efectos, y seguramente se acrecienten (la pescadilla que se muerde la cola). Pero es que tengo miedo. El otro día llegué a casa que creía que me moría, me sentía tan sumamente mal en todos los aspectos que llegué llorando y desfallecida. No sé cómo coño voy a dejar estas pastillas, al menos conseguí reducir la dosis diaria sin verme afectada.
Pese a que lo odie, al final no me va a quedar otra que ir al psiquiatra. Uno nuevo, pues estoy en un sitio nuevo, y como siempre, no resultará, aunque espero que sí (la esperanza es lo último que se pierde, ¿no?). Ya me están viniendo calores, aunque ahora ya no sé si es sugestión o efecto real. Hasta las 8 o más tarde no llegaré a casa...

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Por una vez voy a dejar de leerte desde el Bloglines y voy a entrar solo para poner un comentario a tu post: a los cretinos mejor ni mencionarlos, no les des carnaza y se irán a otro lado a husmear.

En cuanto a lo otro, pues nada: ánimo, ármate de valor y piensa que ya has pasado el mediodía.

susej dijo...

Pues como epaminondas.
Ni caso de los comentarios criticando.

Y ánimo. Un abrazo.

Gabriel Noguera dijo...

Al final no fue tan largo. :D